sábado, 30 de mayo de 2020

El mejor club (3/9)


   —Sabemos qué estás cubierto de gloria —aseguró Adalberto el director del club rubí—, pero tienes que estar muy atento a lo que pase. El capitán de Esmeralda no es ningún tonto. 

   —Lo sé —confirmó Assad, el líder del equipo rubí. Tenía el pelo rapado y larga barba en su rostro, el pecho estaba depilado y vestía trusa de color verde. Contaba los minutos para su pelea y era uno de los miembros más antiguos del club. Apenas contaba con cuatro meses como capitán de uno de los equipos favoritos por la audiencia—. He entrenado arduamente. 

   —Lo sé. Y hay una champaña enfriando para la celebración post evento. 

   Assad sonrió. 

   Por su parte  César el rival del club Esmeralda se miraba en el espejo. Su cabello era estaba corto, su cuerpo entrenado y lleno de músculos. Iba a luchar con una trusa de color lila pero estaba encerrado en el baño de su club cuestionando y repasando sus movimientos. 

   El club Esmeralda tenía años sin algún tipo de reconocimiento o destaque. Muchas veces fueron eliminados, superados por clubes como Rubí, Diamante y Zafiro. 

   Lanzó un suspiro y se lavo la cara. De nuevo detalló su reflejo mirándose a los ojos. 

   —¡A ganar, carajo! —se dio ánimos, sonrió y salió del lavabo, afuera estaban sus compañeros de equipo para inyectarle ánimos, presión, adrenalina y esperanzas. 

   El teatro donde iba a desarrollarse la pelea estaba conglomerado de personas. Simón estaba arriba del cuadrilátero dando un resumen y animando la noche. 

   Assad entró al escenario en medio de una animada canción árabe, tenía un kufiyya de color verde en su cabeza y lo acompañaba un círculo de bellas mujeres que batiendo la cadera al ritmo áarabe lo adoraron.  Cuando subió a las cuerdas superiores se agarró la polla y meneó la cadera. César ingresó sonriendo y dando un apretón de manos al público que estaba en la orilla por donde caminó, ahora parecía relajado y confiado. 

   —Por esta esquina pesando Assad, el jeque del clan Rubí, ¡AAAAAAASSAAAAAAAD! Y por la otra, retando para irse a casa con tres puntos con un peso de 104 kilos, el capitán del club Esmeralda, ¡César! 

   A sonido de la campana el evento dio inicio. 

jueves, 28 de mayo de 2020

El mejor club (2/9)


   Minutos antes de su pelea, Jorge ensayaba ante una pera de boxeo, como era un hombre pesado su golpes hacian fuerte eco al estrellar sus puños en el material. Estaba acompañado por un viejo amigo y conocido del blog se trataba de Erick, que de vez en cuando desviaba su vista a la entrepierna del luchador del club Ámbar, los genitales del varón parecía un grueso chorizo guardado en su pantalón corto. 

   —Estoy preocupado, huevón —decía el hombre resbalando sudor por su moreno rostro—. El club Ámbar siempre ha sido de lo peor en la empresa, muchas veces nos han eliminado en la temporada regular. Esta vez quiero que todo sea diferente. 

   —Tú eres bueno —alegó Erick—, te conozco desde siempre. Como vecino eres genial. 

   —Quiero llevar al equipo a la cúspide. 

   —Hostia, majo, si te propones algo puedes lograrlo —afirmó Erick—. Me has dicho que has entrenado mucho. Y te veo estupendo. Serás el ganador. 

   —Gracias. 

   —Joder, será mejor que me vaya. No voy a entretenerte más, la pelea ya va a iniciar y no me la quiero perder. Te deseo buena suerte, chaval. 

   —Gracias —Erick le dio unas palmadas en la espalda—, a propósito, Erick, ¿cómo has entrado a esta área? 

   Erick sonrió y le mostró la tarjeta que daba acceso al gimnasio del club Ámbar. 

   —Se la he hurtado momentáneamente a Pablo —Erick se rio—. Voy a correr a su oficina a dejarlo en el escritorio antes de que me pille. 

   Jorge se rio y detuvo su fase de entrenamiento. 

   —¿Mucha confianza con el jefe? 

   —Sí, soy uno de sus mejores amigos. 

   —¡Ah! 

   —Mucha suerte —dijo Erick. Y abandonó el recinto. 

   Nicolás, el luchador del club Amatista que se enfrentaría a Jorge, también estaba recibiendo presión de parte del director del club. Ambos club tenían pocos seguidores por sus constantes derrotas en temporadas regulares. Aquella múltiple batalla de clubes inédita representaba un renacer para Amatista. 

   Nicolás era rubio, bien parecido y fuerte. Iba a luchar con una trusa negra. Daría el todo por el todo para ganar los tres puntos iniciales. 

   La expectativa para la presentación de aquella batalla de esa noche representó frías reacciones para la asistente fanaticada. Pablo estaba preocupado por las pocas ventas de entradas. 

   —Ya relajate —dijo David, sentado a su lado. 

   —¿Qué pasa si mi gestión se va a pique? 

   —Si te caes, te sacudes el polvo y sigues caminando. 

   Pablo afirmó con la cabeza, le guiñó un ojo y se preparó para disfrutar la pelea, lo acompañaban también Israel y Marcos Chacón. 

   Simón hacía su presentación ante las cámaras. Saludó a los espectadores hizo un breve resumen de la temporada y presentó a los luchadores. Jorge hizo su debut flexionando los bíceps mientras un juego de efectos pirotécnicos iluminaban su caminar. Nicolás saludó a la audiencia con un video de sus luchas y la canción American Idiot de Green Day pues era aficionado a ese equipo musical. Subió al cuadrilátero y agitó los brazos, seguido trepó a la cuerda superior donde sonrió a la audiencia, lamentablemente fue tomado por sorpresa por Jorge. 

   Cuando Nicolás se volvió para bajarse, escuchó los pasos de Jorge y ya era tarde. 

martes, 26 de mayo de 2020

El mejor Club (1/9)


   Antes de iniciar el combate eran típicas las reuniones entre miembros de un club para desearse suerte, en aquel momento Paul estaba con sus compañeros del grupo Zafiro. 

   —No quiero que se preocupen, muchachos —decía Paul—, esta noche del debut la victoria será nuestra. Ganaré esos tres puntos y llevaremos al club Zafiro al primer lugar. El mejor club de la empresa lleva nuestro nombre. 

   Paul era astuto y muy bueno para brindar ánimos para sus compañeros. Desde que Zafiro había cambiado de director el perfil del club había cambiado de ser un conglomerado de deportistas aguerridos y rudos ahora era un renovado club con atletas unidos y astutos. Paul usaba una trusa, su hermoso cuerpo delgado brillaba entre los adornos azules del despacho. 

   —Te has estado preparando mucho para esto —comentó Salvador, otro de los luchadores del club—, ¿recuerdas los últimos entrenamientos? 
Romer

   —¡Resistencia testicular! —gritó Romer saltando sobre Paul tomándolo de los testículos y apretándolos. Romer era divertido y elocuente. 

   Paul abrió los ojos cuando la presión salió desde sus testículos y le subía al estómago, chilló como nena. 

   —¡Joder, libéralo! —ordenó Miguel el nuevo director del club, Romer obedeció y apartó la mano riendo. Paul enseguida se dobló y buscó asiento para acariciarse las bolas y torcer la boca—. ¿Estás bien? 

   Paul no pudo gestionar una respuesta, solo siguió con las manos en las gónadas. 

   —¡Carajo! Parece que hasta ahora no ha podido endurecer sus bolas —comentó Salvador con desaprobación. 

   —No lo vuelvas a hacer antes de una pelea, Romer. Quiero que todos mis muchachos estén bien para el momento de un enfrentamiento. 

   —Lo siento —se disculpó Romer ante el director y con su capitán de equipo, y sin embargo no se arrepentía de su divertida acción. 

   Fuera del despacho hacia el escenario, Pablo Chacón miraba el público asistente al evento, eran pocas las personas que asistieron, ¿la causa sería que no apoyaban su decisión como nuevo jefe de esa empresa? Dio un suspiro y se preparó para bajar las escaleras y ocupar un asiento VIP con su esposo David en compañía de uno de sus mejores amigos. 

   —Hey, señor Pablo. 

   Era divertido cuando alguien cercano a su edad lo llamaba por aquel apelativo. Era Elmer, el capitán del equipo Diamante, iba vestido con una bata, posiblemente para ocultar su trusa de la vista a los asistentes del teatro. 

   —Señor Pablo, ya me he disculpado con su hermano Simón —indicó—. Ahora quiero hacerlo con usted, como comprenderá la semana pasada le di una patada en los testículos. Espero que usted me disculpe pero solo soy un personaje de mi club y el capitán por demás. 

   —Disculpa aceptada —respondió Pablo—. Pero manten a mi hermano lejos de tus fechorías, mucha suerte esta noche, guerrero y que los tres puntos se los lleve el mejor. 

   Elmer sonrió. 

   —Así será, ya usted verá que esos tres puntos irán a Diamante —estiró la palma de la mano hacia Pablo esperando su apretón. 

   Chacón afirmó con la cabeza e iba a corresponder al saludo cuando recibió un puñetazo en la entrepierna de parte de Elmer. 

   Pablo gruñó y dio un salto para alejarse unos centímetros cubriendo sus bolas. 

   Elmer se burló ante el éxito de su engaño. 

   —La suerte sólo se le desea a los perdedores, a mi se desea éxitos. 

   Se marchó burlándose entretanto Pablo fue a sentarse con un ligero dolor en sus bolas. 

martes, 19 de mayo de 2020

Nueva temporada

   Según la historia publicada el día 15/05/2020 esta semana tenía que comenzar la nueva temporada de Cinturón de Honor pero debido a graves fallas de internet que presenté, se me dificultó programar nuevas historias para esta semana en este blog y las peleas prometidas en Cinturón de honor. Pero ya todos los problemas fueron solucionados y les presento el cartel de luchas a narrar y con su fecha y hora de publicación en exclusiva por www.cinturondehonor.blogspot.com 


lunes, 11 de mayo de 2020

Inicio nueva temporada Cinturón de Honor: El mejor Club

CONTIENE 
BALLBUSTING HOMBRE/HOMBRE

   Las luces enfocaban el centro del escenario, el cuadrilatero fue preparado para la primera transmisión de la nueva temporada de Cinturón de Honor, había una nueva directiva que deseaba implantar cambios. Simón Chacón, un reconocido presentador de televisión iba a ser la imagen en emitir la invitación a los cientos de seguidores de la empresa. 

   Pablo Chacón quien estaba al frente de la presidencia de Cinturón de Honor estaba nervioso con el lanzamiento, su nueva función de trabajo había despertado tibias reacciones en sus seguidores. Y se sentía expectante con los resultados en los próximos días. Finalmente el número de conectados en la web no era una cantidad despreciable para su alivio. 

   Simón usaba una camisa muy ajustada de color azul y pantalones. Se veía fuerte y poderoso. Estaba reunido con Asad, Paul y Jorge, cada uno de ellos era el capitán y miembro principal de su club. 
Assad

   El de descendencia árabe: Assad era de piel aceitunada, cabello rapado y estatura alta. Pertenecía al club Rubí uno de los favoritos del público. Vestía de negro y usaba gafas oscuras.

   Del club Zafiro representado por el color azul estaba Paul, era blanco, con el cabello muy negro y con barba en su cara. 
Jorge

   —Tenemos las expectativas a 1000 en esta nueva temporada que comienza —indicó Jorge, el capitán del club Ámbar. Su tez era morena, de bastante peso y con músculo desarrollados por rutinas matinales de gimnasio. 

   Simón asintió y sonrió. Apuntó el micrófono al luchador de rubí. —¿Por qué apuntar la participación en peleas vale todo en contraste a un sistema de lucha profesional? ¿O de eróticas como alguna competencia? 

   Asad se echó a reír. —Muy sencillo, cuando estamos en la calle en una pelea, la regla es para el superviviente, el más fuerte. Vale todo. 

   —¿Preparado para la nueva temporada? —interrogó el periodista a Paul. 
Paul

   —Por supuesto —afirmó el deportista—. El club Zafiro ha estado entrenando arduamente día y noche para llevar al club a la cúspide. 

   Simón afirmó con la cabeza y después dirigió unas palabras a la cámara. Aquel material de grabación iba a ser publicado horas después por redes sociales. Chacón consultó su reloj y salió al escenario la transmisión por internet iba a ser en vivo. 

   La transmisión iniciaría en 60 segundos. 

   50… 30… 15…5… 1.

Comenzaba la transmisión en vivo y Simón dirigió una mirada sonriente a la cámara. 

sábado, 2 de mayo de 2020

Nueva directiva

CONTIENE
BALLBUSTING HOMBRE/HOMBRE

   Era un día importante y lleno de buenas noticias para unos y de malos augurios para otros. Todo el equipo que conformaba la empresa se había reunido en el auditorio principal, ocupando cada asiento estaba cuerpo técnico, talento deportivo, administrativo y demás departamentos. Finalmente ante el podio de vidrio y elegantemente vestido con traje y corbata el señor Rudolphy se dirigía a todos usando el micrófono. 

   —Desde el año pasado, 2019, y el inicio de éste 2020 ha sido difícil para la empresa Gema. Pasillos llenos de rumores, chismes, murmullos, historias. Y seguir así no es bueno. Los he citado hoy para la verdad. Hay que afirmar qué de todo lo que se dijo hay algo de cierto. La empresa Gema sufre una terrible crisis rumbo a la bancarrota —enseguida una ola de murmullos alborotó al público que se debatía entre el respeto ante quien fue un respetado empresario o quien los hundió en la crisis plena. 

   Él pidió que retornase la calma para poder continuar y cuando el silencio volvió pudo continuar. 

   —Gema siempre se caracterizó por ser unas de las mejores empresas de entretenimiento deportivo. Conformada por clubes de peleas que nos bañaron de gloria y estrellato. Era divertido oír en la calle a los seguidores del club Diamante, con hombres sólidos, el club zafiro con hombres rápidos, los divertidos del club amatista, el favorito club rubi, ámbar con luchadores aclamados, esmeralda un club de guerreros rudos. Gema se creció como una empresa sólida ante sus principales competidores: Guerreros de la arena, El Sótano y el Club Five-two. Y es que teníamos algo que al público le gustaba, nuestro sistema de peleas por temporadas, la eliminación de club donde prevalecía el más fuerte y las constantes renovaciones anuales de nuestro staff de luchadores, los mejores del mercado. 

   —¿Por qué se expresa hablando en pasado? —se atrevió a preguntar una mujer del departamento de marketing. 

   Pero el señor Rudolphy la ignoró y siguió mirando al público cuando en realidad no miraba a nadie y continuaba en un monólogo melancólico y de orgullo. 

   —El Cinturón de Honor fue un elemento simbólico para la empresa que nos marcó —mostró al público un cinturón que con orgullo obstentaban los luchadores de la empresa—. Y es un elemento de valor para nuestros deportistas, imponiendo su orgullo, superioridad y grandeza. Mientras más veces gababa una pelea un club y eliminaba a otro equipo, mayor era su respeto en la empresa. 
“Pero no todo es gloria y éxito —continuaba su exposición el señor Rudolphy—, me confie y transmití esa altanería al equipo, se hicieron muchos eventos donde hubo alto derroche de dinero. Eventos y pagos millonarios al talento de la empresa, hubo muchos gastos y las deudas aumentaron, haciendo insostenible pensar en el futuro, la caja chica de la empresa se agotó. 

   De nuevo volvieron los murmullos, más azotados que nunca. 

   —A inicios de año cuando la crisis se agudizó decidí tomar acciones —habló el señor Rudolphy acallando a todos con un ademán—. Y tome la decisión de no echar por la borda lo que construí por muchos años. Un bonito emporio lleno de importantes talentos, la empresa Gema ha sido vendida y un conglonerado de personas ocuparán nuevos cargos, gente joven y preparada. Sé que la sabrán sacar adelante. La nueva directiva de Gema y Cinturón de Honor entrará a cargo de la empresa a partir del 04 de mayo del 2020. Ellos están aquí hoy con nosotros y serán presentados. Poco a poco darán a conocer las renovaciones que presentarán en el show y las medidas para seguir manteniendo vivo el Cinturón de Honor. El nuevo director de la empresa es un hombre muy joven de apenas 29 años. Sí, será una prueba para él. Su resumen curricular es prometedor, es un joven economista y estoy seguro que va a saber llevar por el buen camino Gema y Cinturón de Honor. En su haber también hay pasión por el wrestling, su nombre es Pablo Chacón y hoy está acá con nosotros.